ETLETERA EN ESPAÑOL

Hay un final de verano, en las olas de mi mar. Un calor que es mío y diferente. Que he extraído y sintetizado, como si savia fuera, de los abismos  formidables de los momentos. De las andanzas por lugares solo míos que recorrí de manos dadas con un fado mucho más grande que mi destino. De andanzas que ahora son ya caminos. Hay, sí, un final de verano, en las olas de mi mar. Pero ya soy Otoño. Caliente, todavía, y cargado con todos colores de Verano. Sin hojas sueltas corriendo por el suelo, marchitas, arrastrándose sobre las piedras lisas con el sonido grave del  fuego crepitando en las hogueras. Porque mis hojas, son sueños que el viento lleva y, a cada una, mi pasión desmesurada: - mi grito de amor que nada, nunca, igualará. Por eso, mis hojas irán teniendo de mí más que yo mismo. Me llevarán en todos los poemas que yo alcanzar a ser, y tal vez por mí enciendan estrellas, raras, sembradas únicas como diamantes, que darán voces a madrugadas y silencios. Encen

Alcanzo a saber de un lugar, entretiempos, dónde me pierco de las palabras necesárias , me desarmo de los gestos coherentes  adoptados  por el tiempo de una vida entera y balanceo  en ese espasmo  de la vez primera como un estai golpeando en nortes diversos  cazando playas y dunas imaginarias, dónde me inscribo, en huellas y tormentos. Alcanzo a saber de un lugar, entretiempos, dónde son las noches la razón de los dias arrastrados, el subterráneo de un espacio cercado por flores raras y exacerbadas alegrias, dónde entre mofos y tantas poesias  buceo en versos de corazón rasgado, me pierco en textos inacabados, naufragando  en deseos  y sentimentos. Alcanzo a saber de un lugar , entretiempos, dónde el mar cási manso me espera, sonriendo en playas y coqueros  que el viento olvido, extenuado de  devaneos y correrias. En su rumbo navego todos los dias,  mi proa en espumas ,  en ese mar que es tan mio de horizonte siempre renovado y  sempre lindo, levando en mis lá

Yo me pierdo donde se pierden las palabras. En aquellos meandros más sublimados de las emociones sofocantes, donde se rasgan los gritos del que la voz no dice y que los silencios tampoco alcanzan a traducir. Y me pierdo en los sentidos remotos, inciertos, implausibles, del impensable ahora hecho armonía, para alguien, insospechadamente. Me pierdo en el verbo corto, seco, incapaz, de los sentimientos confusos, mal definidos, y en los colores átonos del que se queda por decir. Me pierdo donde se pierden las palabras. Donde otros valores se instalan, desafiantes, alcanzando disfrazados espacios y sentidos, en un otro vértigo igualmente necio. Me pierdo donde nos perdemos todos, donde el diálogo y las palabras se ausentan. Me pierdo donde nos perdemos de nosotros. COPYRIGHTHENRIQUEMENDES/2017 .

                                                 Tal vez las haiga, palabras más allá de las palabras más sencillas. Qué me expliquen más en azul, cuando quiera decir “cielo”, o que hagan más verde la hierba  en los campos  por donde galopa, disparado, esse caballo que monto rumbo al más lento de todos los destinos . Las hay más claras, más vehementes, y más bellas. Pero yo soy caballero antíguo, y las busco en las curbas hechas por los camiños, en los secretos de lo polvo mil veces  levantado, que mil veces se depositó despacito sobre el mundo - y mil veces  reveló detalles preciosos de histórias que nadie contó. Vengo de un tiempo  en que las palabras eron sencillas y iguales,  preciosas, fáciles de usar. Sonaban, decian, y no contaban historias. Hoy cuento, de todas la veces, cuidadosamente, el precio que pago para que las cuenten. Y digan exactamente  qué colores quiero en mi cielo y cómo pinto mi destino.  COPYRIGHTHENRIQUEMENDES/2017 .

Para  que encuentres tu poema basta una noche amena y que seas en el jardin… que tus ojos vean belleza donde sientas la firmeza de caminar hasta el fin y se aun no estuvieres seguro tombe la casa y quede el muro que nadie sabe  su raiz sin recorrer  en sus pasos trabajos,  amigos y abrazos e campos sacros de maiz -mira qué yo tampoco sé se un dia alcanzaré a muestrarte de mi ese poco que también tengo, hecho lejos  de donde vengo  un destino que se escribe asi en letras donde pongo ganas gritos mudos, abiertas ventanas y mundos tan llenos, lejanos de mi… COPYRIGHTHENRIQUEMENDES/2017

Aún puedo ver a lo lejos  aquel árbol solitario que un día viste a través de mi mirada.  Acostada en la hierba, a la sombra mirabas el horizonte luminoso y aquella colina distante, de donde te observaba el árbol como si fuera un espejo de ti, altanera, y tenías los pensamientos sencillos que los árboles tienen cuando quieren apenas ser, o apenas estar. De tu piel se erguían con simplicidad, en un coro alucinante a los sentidos, las voces de tus raíces profundas - que ninguna cáscara contenía y ninguna ropa podría disfrazar . Era  el lenguaje antiguo de la tierra caliente bajo la hierba  mojada, repitiendo historias de savias por entre sonrisas de labios fértiles. Y tus gestos eran  levedades de viento en caricias de hojas, como dedos, rozando por un instante a mi cara feliz. (Aún veo a lo lejos aquel árbol solitario. Mientras me observa, protege en secretos de sombras lo que un día viste a través de mi mirar...) COPYRIGHTHENRIQUEMENDES/2017

Adiós Poetas ! Temo que llegarán los dias  en que la línea, como una risotada interrumpida, se quedará inconclusa. Por escribir… Mas en ese día nada se quedará diferente. No cambiará el espacio, que seguirá vago, como siempre lo estará el espacio de los poetas. Disponible. Y que, a pesar de eso,  seguirá repleto porque jamás podría quedarse de otra forma un espacio que la propia ausencia llena y enuncia.  Y lo que restar  en la memoria de los otros capable de merecer una cita concreta, reproducible, una frase lapidaria que ilustre bien una situación, o que claramente apunte un norte, será tan importante cuanto ese espacio de ser inmutable, que nada jamás ha alterado, y que ningún fin terminará.  Y si nada llegar a cambiar a los ojos de los otros, si hubier  apenas una vaga sensación de falta, de cosa indefinible que el cotidiano crudo apagará habrá aún la memoria de aquellos que un día, por todo el breve tiempo encantado de un  poema, volaron más alto y vieron e

Pintamos con nuestras colores los sentimientos y aquellos congelados momentos a que damos vida  y prestamos sueños. Eternizamos sutilezas en cronogramas intemporales, qué musicamos con nuestra voz. A todo lo que ya era, damos foco e, tenendo suerte, substancia y ritmo, luz y sombra, en suaves alternâncias. Tenemos con nosotros una responsabilidad añadida por esa consciência más que física, de quien interpreta la vida en etéreas vibraciones de suaves consonâncias, añadindole algo  además de la belleza. Es eso que hacemos, en persistentes onanismos rebuscados, de penas y teclas… Dándole nombre, hacemos poesia en placenteras dolores y lentitudes y inevitables fascinaciónes personales,  en renovadas vagas de repetición, que no son más que una tautologia, un outro foco, una outra sintonia, una misma vieja cosa  en una outra forma de uno se expresar… Algo que todo el mundo ya via  pero… de que no sabia hablar! Mas, el que aún no tenemos  y quizá no tendremos nu

A ti, Poeta Y a tu mirada, siempre tan diversa de la realidad menor del cotidiano usual aplastado y gris… A ti Poeta Que no te olvidas  jamás de como es importante sentir siempre, fascinado como un niño en la calle… Y a ti, Poeta Para quien  cantar el amor no es más que un acto de justicia, sublime y espontaneo… A ti Poeta De trato sencillo y afable que mojas tu pluma en una tinta de cielo oscuro pero escribes con el brillo de sus estrellas… A ti digo, Poeta, en tu día… Que no te olvides de tu misión ejemplar, y no te percas de ti, en aquellas rutas estrechas  del  porvenir monótono y insípido. A ti digo, Poeta y amigo, Que tu don es esencial, en su sencillez pura, sin que te derrames en excesos o no dejes sentirte la falta… Por eso no tardes a eso que eres, Sin objetivo, o compromiso dolorido, pero por placer impostergable, dando voz al sangre y alma a los tiempos. Rescatando eso que somos todos, sin que algunos lo sepan por falta de ejemplo. Un

AQUI ME TIENES                                                                                  Jan/2010                                                                                                     Aquí me tienes. Mira cómo, además de  los gestos, mis manos aún acarician hipótesis de secretos tuyos. Por eso se quedan tan inmóviles.  Porque son secretos. De otra forma,  podrían  revelar más de lo que quieres que sepan que yo sé,  y hacer  los gestos de cariño que, así,  apenas encontrarás ocultos en mis ojos,  cuando veas que te miran. De otra forma podrían esculpir letras en  las nubes blancas de todos los cielos para que tu nombre  fuera como una sonrisa perpetuada en las mañanas. O intentar tejer el hechizo dulce que ya nos acerca siempre,  como si fuera posible añadir algo a lo que ya es todo.  copyrigh tHenriqueMendes/2010